El otro día, un loco del manicomio se estaba ahogando en un río que se encontraba dentro del recinto. Otro loco lo salvó y lo sacó del río.
Entonces, el día siguiente, se presentan los directores del manicomio y le dicen.
– Bien, tenemos dos noticias para darte. Una buena y una mala. La buena es que como salvaste a ese hombre, hemos visto que usted no esta loco y se podrá ir mañana de aquí. La mala, es que dos horas después de que le salvara, el hombre se ahorcó.
Entonces el loco dice:
– Que no que no, que lo colgué yo pa que se secara.
chistes de locos
Paseando piedras
Va un loco paseando por el psiquiátrico con una piedra atada a una cuerda. En esto que se le acerca el director del centro, que ya estaba harto de tanto loco, y le pregunta:
– Que, paseando al perrito, ¿no?
– Pero que perrito, no se da cuenta de que es una piedra?
– Muy bien, muy bien, para que vea que nosotros somos sensibles a las mejoras de nuestros pacientes le voy a dejar en libertad. Total que sale el loco a la calle con su piedra y vuelve la cabeza y dice:
– Ves lo que te dije, jimmy, si no ladrabas les engañaríamos!!!
Enviado de Dios
Esto era un manicomio lleno de locos, todos haciendo algo. De pronto un loco se levanta y dice:
– Yo soy el enviado de Dios.
Otro se levanta y dice:
– ¡No mentiroso! ¡Yo soy el enviado de Dios!
Y se levanta otro:
– Yooo soy el enviado de Dios.
Y así todos se comenzaron a pelear entre ellos, cada uno diciendo lo mismo. De pronto alguien gritó aún más fuerte y todos escucharon:
– Tranquilos, no sé que les pasa, ¡Porque yo no he enviado a nadie!
Debajo de la cama
Una conversación entre 3 locos:
– Mi mujer me engaña con un albañil.
Le preguntan los otros:
– ¿Como lo sabes?
– Porque al llegar a casa me encuentro ladrillos y sacos de cemento debajo de la cama.
Dice el segundo:
– Pues la mía me engaña con un carpintero.
– ¿Como lo sabes?
Le preguntan
– Por que siempre me encuentro la sierra debajo de la cama.
– Pues mi mujer me engaña con un caballo.
– Eso si que es raro, ¿como lo sabes?.
– Porque todas las noches me encuentro al jinete debajo de la cama.